En el stand de A-DATA del CeBIT se puede ver un SSD que no deja indiferente a nadie, ya sea por sus prestaciones o por el precio que, si bien todavía no se sabe, se espera estratosférico.
Esta unidad de 512 GB de capacidad con interfaz SATA II y formato de 2,5", promete velocidades de 230 MB/s en lectura y 160 MB/s en escritura.
Si juntamos la capacidad con la velocidad tenemos algo muy bueno, pero a su vez todavía muy caro... aunque lo que está claro es que el almacenamiento sólido evoluciona a marchas forzadas para comerle terreno a los discos duros tradicionales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario