Intel ha anunciado que tiene planeado procesadores de 22 nanómetros para 2011, año en el que ya los tendrán preparados.
Otros fabricantes piensan que el siguiente paso de los 32 nm es a los 28 nm, pero Intel pasa directamente a los 22 nm, lo que supone una clara ventaja frente a sus competidores. La plataforma tendrá el nombre en clave Sandy Bridge. Puede que tengan ciertas similitudes con los Westmere, que en principio saldrán en 45 nm, pero luego harán el salto a las 32 nm.
Menos nanómetros significa, pues, una mayor cantidad de transistores, más potencia, menos consumo, menos calor generado... Las mejoras son siempre evidentes en cuanto nos ponemos a reducir micras. Habrá que esperar a ver el tipo de arquitectura de que se trata, y las mejoras añadidas a las evidentes a la miniaturización.
Lo que es seguro es que antes nos esperan los Westmere, así que aún queda un tiempo antes de poder pasar por el Sandy Bridge.
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