El tribunal de Milán, en Italia, ha condenado a seis meses de cárcel a tres altos ejecutivos de Google Italia, por la publicación de un vídeo vejatorio que se subió a Youtube. Esto constituye una sentencia histórica, y es la primera en el mundo que da la razón a la acusación, por responsabilizar a los dueños del servicio de vídeos sobre los contenidos que los usuarios suben. En el vídeo en cuestión se podía ver a un joven discapacitado ser objeto de burlas y maltratos por otros jóvenes. Este vídeo estuvo un tiempo en el servicio, pero finalmente fue borrado y además se ayudó a localizar a los responsables. Pero todo esto no ha servido para que se libren de la condena.
Google ha manifestado que el resultado judicial supone una grave agresión a la libertad de Internet. Según declaró Matt Sucherman, vicepresidente de la compañía, la sentencia "ataca los principios más elementales de la libertad sobre la que Internet está construida”. Si la sentencia fuese firme, y sentará precedente, Google tendría que intervenir y comprobar todos los vídeos que se suben, lo que supondría una modificación seria del sistema del servicio. La compañía ha apelado la sentencia y esta todavía no es firme.
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